Uno de los factores más importantes al establecer una relación sentimental es hablar sobre las finanzas en pareja, ya que de esta manera pueden mejorar su economía y reafirmar la confianza que se tienen. Por ser un tema delicado, te daremos sugerencias para abordarlo y construir una base financiera sólida en donde los problemas económicos sean mínimos y se puedan conversar sin perder la armonía.
Para lograr unas finanzas sanas, trata de no cometer los siguientes errores:
Si estás pensando en acordar cómo compartir gastos en pareja en tu relación, la honestidad es el mejor punto de partida. Desde el principio de una relación, es crucial hablar de los gastos en común que tendrán y sobre sus aspiraciones económicas. Evita ocultar tus deudas y gastos personales, pues esa información les permitirá manejar mejor el presupuesto, sin secretos que les causen dificultades a futuro.
Al ignorar el plan que se estableció en un principio, será difícil alcanzar sus metas en el tiempo establecido. Como todo compromiso, lo mejor es cumplirlo y, si te das un gusto fuera del acuerdo, conversa con tu pareja. Tomen esta oportunidad para mejorar, crecer y retomar su presupuesto, sin afectar su calidad de vida.
Un elemento relevante de las finanzas en pareja es definir un monto para imprevistos que puedan surgir en la vida o en el hogar. No tener cómo enfrentarlos puede causar un estrés innecesario a su relación. Lo ideal es que siempre cuenten con ese fondo, pues eso les permite resolver sus desafíos financieros sin afectar su economía.
El presupuesto debe ajustarse a la realidad, porque si no corresponde a su estilo de vida, deja de ser efectivo y pueden alejarse de sus objetivos. Por lo mismo, es necesario revisarlo cada 15 días o una vez al mes para actualizar sus gastos y aportaciones. Con ello sabrán si permitirse un consumo extra o si es mejor no hacerlo.
Como en toda relación, ambos deben tomar las decisiones importantes, ya sea cómo compartir gastos en pareja, las compras que se van a hacer, etcétera. Así podrán llegar a acuerdos, respetar la opinión del otro y actuar como equipo.
Pensar en el futuro les ayudará a ahorrar, apegarse al presupuesto y darle un propósito a sus esfuerzos. Sin metas compartidas, es posible perder la motivación, afectando su planeación de las finanzas. Soñar juntos los une y facilita administrar dinero en casa.
Una vez que las tengan, pueden establecer roles claros para hacerlas realidad, pensar en dónde van a dejar sus ahorros, además de exponer claramente sus opiniones y necesidades para el beneficio de ambos.
Depender únicamente de un ingreso es un gran riesgo financiero, pues incluso con un salario extremadamente alto, esto no garantiza tener estabilidad para la vida juntos si surge un imprevisto serio. Lo mejor es que las dos partes participen, platiquen como pareja qué se puede hacer para generar más ingresos. Podría ser emprender un negocio desde casa o vender artículos que ya no utilicen. Para estar en igualdad de condiciones, si alguien se dedica exclusivamente a los quehaceres de casa, merece recibir un monto justo como salario.
Muchas veces no se considera el ahorro y la inversión debido a los gastos que se generan a diario en el hogar. Sin embargo, es vital priorizar estos dos elementos para tener más oportunidades de hacer crecer su economía.
Para administrar y construir un futuro financiero sólido sin que tu relación pase por conflictos que se pueden evitar, es importante llevar la administración del hogar con transparencia, teniendo presente que se deben compartir los gastos y con buenas prácticas como:
Para entender cómo deben ser los gastos en pareja, la clave es comunicarse y mantener la mente abierta sobre las expectativas financieras que tiene cada uno. Esto es importante en diversas etapas, comenzando en el noviazgo, al preparar la boda, comprar una casa, si piensan tener hijos, entre otros temas fundamentales de las relaciones.
Finalmente, solo queda mencionar la relevancia de evitar estos errores y trabajar en conjunto para construir una base financiera sólida a través de la comunicación, colaboración y una planificación adecuada para la vida en común.