Tener clara la diferencia entre tarjeta de crédito y débito es básico para que le puedas dar el mejor uso a ese par de productos financieros que ya son tan comunes en la actualidad, y que te pueden servir para mejorar el manejo de tu dinero y tus finanzas personales.
Las tarjetas de crédito y débito son herramientas financieras esenciales que facilitan las transacciones y ofrecen múltiples beneficios. El Panorama de Inclusión Financiera 2023, revela que en el último trimestre de 2022 se emitieron 10.4 millones de tarjetas de crédito y 76 millones de tarjetas de débito.
Pero, ¿qué es una tarjeta de débito y crédito? ¿En qué se diferencian? Conócelo a continuación.
Primero, tienes que entender en qué consisten estos servicios. Toma nota:
Es un producto financiero que sirve para comprar artículos o solicitar servicios, sin que sea necesario que el usuario cuente con el dinero en el momento de realizar dichas compras, pues el pago de estas es aplazado hasta el siguiente mes de que fueron hechas.
Si quieres saber cómo funciona una tarjeta de crédito, es bastante simple. A la persona que la usa le es concedida una cantidad limitada de dinero de la que puede disponer, ya sea de forma parcial o total (incluso para hacer retiros de efectivo).
Posteriormente, cuando es utilizada una parte de esos fondos, se contrae una deuda. El dinero prestado debe devolverse en el periodo establecido (fecha de pago), para evitar generar intereses innecesarios. Se podría decir que esta es la diferencia más importante entre tarjeta de crédito y débito.
Además, para evitar rebasar los niveles de deuda de una persona, las entidades financieras evalúan la solvencia del solicitante para que no existan dificultades en el manejo de la tarjeta.
Por otro lado, la tarjeta de débito es el medio de disposición de recursos de una cuenta financiera (de banco, vales, SOFIPO, etc.) ya sea a través de retiro de efectivo en cajeros automáticos o en corresponsales y para realizar compras en los comercios. Aunque este producto también sirve para realizar compras, su funcionamiento es diferente.
En el caso de la tarjeta de débito, el dinero que se utiliza se asocia con la cuenta bancaria del usuario, por lo cual solo se usa el saldo que se tenga disponible en ese momento.
De este modo, cuando se hace una compra o se retira dinero de algún cajero automático o directamente en la ventanilla de una entidad bancaria o financiera, los recursos gastados se descuentan de forma inmediata.
Finalmente, gracias a los registros que genera y que se pueden ver en los estados de cuenta, este producto es útil si lo que se busca es tener un mayor control de gastos. Al entender la diferencia entre tarjeta de crédito y débito, tu manejo del dinero será más eficiente.
Aunque por su naturaleza ya puedes identificar algunos aspectos particulares, es importante hacer énfasis a detalle en qué diferencia hay entre tarjeta de crédito y débito, para que no haya lugar a dudas:
El origen de los fondos en este tipo de tarjeta es directamente de la institución que la pone a disposición, es decir, que esta es la que paga las compras. Existe un límite de recursos disponibles y este es determinado por la entidad financiera emisora.
Como es posible disponer de fondos que no se tienen, es posible que los gastos rebasen el presupuesto, por lo tanto, es importante tener en cuenta que una tarjeta de crédito no significa dinero gratis, sino más bien un préstamo que hay que devolver a futuro y que genera intereses si no se paga a tiempo. Si la empleas con disciplina, el registro de los movimientos realizados en el mes te ayudará a conocer mejor tus hábitos en cuanto al uso del dinero.
Es común que las entidades financieras brinden incentivos o recompensas al utilizar este producto, como puntos por compras, retorno de efectivo o “cashback”, descuentos especiales en ciertos establecimientos, entre otros. Finalmente, su uso afecta el historial en las Sociedades de Información Crediticia (SIC), como el buró de crédito, de forma positiva o negativa.
En este caso, los fondos de la cuenta bancaria asociada del usuario son propios, o sea, que se utilizan sus recursos directamente para pagar. Por esto mismo, el límite máximo es el que la persona determine con el dinero que guarde en dicha cuenta.
Los gastos entonces son precisos y dependen de los fondos disponibles, sin generar una deuda. Por ello puede haber una mayor organización y cuidado al hacer un presupuesto que se adapte a tus necesidades, dado que el dinero eventualmente se agota.
Para esta tarjeta no es usual que existan comisiones, más allá de una posible cuota de reposición en caso de perder el plástico, pero eso está a criterio de la institución financiera.
Normalmente, no hay recompensas por su uso, y este tampoco afecta al historial crediticio.
Una vez que hayas comparado las tarjetas de crédito y débito, ¡es hora de tomar una decisión! Acércate a tu banco favorito, como BanCoppel, y solicita la que mejor se adapte a tus necesidades.
Es posible abrir tu cuenta y recibir una tarjeta de débito para que hagas uso libre de tus recursos sin tener que cargar con el efectivo.
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